sábado, 26 de mayo de 2007

Hubo una vez una llamada a las tres de la mañana, un quimérico juego de ternuras que no era más que una historia mal contada. Hubo una vez unos segundos necios, dos miradas fijas que algo tendrían, qué se yo, de necesarias. También hubo risas y “momentos” y llantos inconclusos, una vulgar novela de un único capítulo, corto además: mal escrito. Hubo una mujer sin rumbo y un hombre con muchos rumbos fijos. Algo de sinceridad, un poco de cariño prometido (de antemano, por supuesto). Hubo cierto espíritu de lucha y muchas ganas de creerlo todo. Hubo vino y música y deseos… un relato convertido en sal cuando miró el futuro desobediente y terco, tentado a saber qué existe más allá del límite propuesto.

Hubo una vez una llamada, de madrugada. Una mirada innecesaria que algo dijo… pienso que sí la hubo (no me crean tanto).

1 comentario:

Anónimo dijo...

EN OTRAS PALABRAS...UNA NOCHE DE COPAS UNA N0OCHE LOKA..LIVING THE VIDA LOKA..LOKA LOKAAAA.
GUT...
MAFALDA